El jefe de Gabinete de la Municipalidad de Ushuaia, Sebastián Iriarte, sostuvo que “la retirada del Gobierno nacional marcó nuestra gestión” en 2024, ya que el desfinanciamiento generó “incertidumbre” y la interrupción de una importante cantidad de obras planificadas, licitadas y en ejecución. Y afirmó que en 2025 “desde el Municipio vamos a defender los intereses de la ciudad y los vecinos”.
En diálogo con FM Master’s el funcionario dijo a modo de balance que “fue un año intenso en el que tuvimos muchos desafíos de gestión y atravesamos muchas dificultades”.
En esa línea, manifestó que “en términos económicos el salto inflacionario a partir del giro de 180º grados de la economía argentina produjo un cimbronazo en los primeros cuatro meses del año, en los que hubo una incertidumbre importante que generó una serie de cuestiones en la administración”.
Citó como ejemplo que “el plan de obras no fue el que esperábamos por el retiro de la financiación del Estado nacional, pero pudimos corregir eso y se viene avanzando bien”.
En esa línea, advirtió que “esa retirada del Gobierno nacional marcó nuestra gestión este año ya que más de 20 mil millones de pesos no se destinaron a obras para la ciudad que ya estaban planificadas, y que al no concretarse afectan a la calidad de vida de los vecinos y vecinas, e incluso de quienes nos visitan”.
“Tenemos paradas obras de infraestructura de agua que se dieron de baja, viviendas que no se pudieron terminar, obras que no se concretaron como la de la reparación vial del ingreso a la ciudad, la cual vamos a intentar realizar con fondos propios”, enumeró.
También apuntó que “se vio interrumpido el financiamiento internacional del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) ya que no continuaron los desembolsos”, y eso impidió que para el 140º aniversario de la ciudad “pudiéramos contar con la obra terminada de la pasarela Pedro Fique, que le va a cambiar la lógica y la estética a un sector histórico de la ciudad”.
Iriarte agregó que por la interrupción de la llegada de fondos nacionales “hay muchos contratos rescindidos y otros sobre los que no hay resolución, hay contratos vigentes que no avanzan, obras que fueron licitadas y de las cuales se entregaron los anticipos financieros ya se a través de Nación, o del CAF o del Fondo de Ampliación de la Matriz Productiva, y no se pueden concretar”.
“Esto se tiene que resolver y lo que hizo la Nación es solo pasar la motosierra y cortar el financiamiento, pero no se sentó a negociar con ninguna de las empresas”, planteó el jefe de Gabinete, y entendió que “el año que viene eso debería resolverse y desde el Municipio vamos a defender los intereses de la ciudad”.
Iriarte evaluó que “vamos a tener los mismos desafíos el año que viene pero con otra perspectiva”, ya que “va a ser un año electoral y se van a tener que resolver distintas situaciones, como la de la llegada de los fondos nacionales”.
En esa coyuntura consideró que “tenemos que encontrar un punto de equilibrio entre continuar con la obra pública, recomponer el salario de los trabajadores municipales, y brindar los servicios que brinda el Municipio; no podemos generar un desequilibrio económico porque sería muy difícil en este contexto nacional en el que no llegan los aportes de la Nación y de organismos internacionales para realizar obra pública y diversos proyectos”.
Finalmente, Iriarte expresó que “desde la gestión siempre hay cuestiones para mejorar y lo central es hacer más eficientes los servicios que brindamos como Municipio”, pero advirtió que “también dependemos de decisiones políticas del Gobierno nacional, ya que pasó una motosierra que no tiene en cuenta que en el medio están los vecinos y las vecinas”.